¿Es recomendable las vendas de crepe para realizar terapia compresiva?

El papel del vendaje compresivo terapéutico es crucial en numerosas situaciones clínicas. Es posible que te estés preguntando, ¿por qué no deberíamos usar venda de tipo crepé para este tipo de vendaje? La clave de esta pregunta radica en la comprensión de los conceptos de presión de trabajo, presión de reposo y rigidez.

Presión de trabajo, Presión de reposo y Rigidez.

Para entenderlo, debemos saber que la presión de trabajo es la presión que la venda ejerce durante la actividad muscular, mientras que la presión de reposo es la que aplica cuando el músculo está en reposo.

La rigidez se refiere a la capacidad del vendaje de resistir los cambios en la presión de trabajo y de reposo. El vendaje compresivo terapéutico necesita proporcionar una presión decreciente desde el tobillo hasta la rodilla o el muslo, lo que se conoce como presión graduada. La venda de crepé, a pesar de ser elástica, no logra mantener esta presión graduada correctamente debido a su baja rigidez.

La venda de crepé no es adecuada para el vendaje compresivo terapéutico

Ejemplo

Tienes a un paciente que se llama Luis, el cuál padece de una úlcera venosa en su pierna. Usamos una venda de crepé para su vendaje compresivo terapéutico.

Al principio, todo parece ir bien, pero a medida que Juan se mueve, la venda se desliza y pierde su efectividad. La presión graduada desaparece, perdiéndose así los beneficios del vendaje.

¿Cuál es el riesgos de usar incorrectamente las vendas en el vendaje compresivo terapéutico?

El uso inadecuado del vendaje compresivo terapéutico, como sería el caso si utilizáramos vendas de tipo crepé o vendas de gasa, puede llevar a complicaciones serias, como:

Compresión Inadecuada
Aumento de Edema
Lesiones en la Piel
Complicaciones Circulatorias
Inestabilidad del Vendaje
Dificultad en el Control de la Compresión
Reacciones Cutáneas e Infecciones

¿Qué puede ocasionar un vendaje demasiado apretado con vendas de crepe o de gasa y sin una presión graduada de los mmgh?

Un vendaje demasiado apretado y mal distribuido puede dañar la piel y los tejidos subyacentes, creando un ambiente propicio para el desarrollo de úlceras por presión o en casos graves necrosis cutánea, como:

Isquemia (Falta de Oxígeno en los Tejidos)
Lesiones Nerviosas
Aumento del Edema
Lesiones en la Piel
Compromiso Circulatorio en Extremidades Distales
Dolor Intenso y Disminución de la Movilidad
Trombosis Venosa

¿Y si el vendaje esta flojo o suelto?

Por otro lado, un vendaje demasiado suelto no proporcionará la presión adecuada para controlar el edema y puede que no ofrezca soporte suficiente para mejorar la circulación venosa y linfática. En el caso de las úlceras venosas, por ejemplo, un vendaje flojo puede no ofrecer la presión necesaria para mejorar el retorno venoso, lo que puede retrasar el proceso de curación.

DATO CURIOSO

Usualmente y por cultura muchas veces hemos vendado los pies antes de un procedimiento quirúrgico, esto con el fin de evitar una Trombosis venosa profunda (TVP)

ESTO NO SIRVE

Ya que los vendajes de crepé o de gasa no son efectivos para prevenir TVP. Estos vendajes no proporcionan la presión graduada ni el nivel de compresión necesario para estimular el retorno venoso de manera significativa y efectiva, que es crucial en la prevención de la TVP.

¿Cuál sería la venda ideal?

Para obtener un vendaje compresivo terapéutico efectivo y seguro, se recomienda utilizar vendas de corta tracción.

Estas vendas, gracias a su rigidez, son capaces de mantener una presión constante y controlada, resistiendo los cambios que surgen con el movimiento del paciente.

NO HAY QUE OLVIDAR:

El vendaje compresivo terapéutico necesita proporcionar una presión graduada, es decir, una presión que decrece desde el tobillo hasta la rodilla o muslo.
Usar vendas de tipo crepé puede llevar a un deslizamiento del vendaje y pérdida de efectividad con el movimiento del paciente.
Un uso incorrecto del vendaje compresivo, como el uso de vendas de crepé, puede dañar la piel y los tejidos subyacentes, comprometiendo la circulación.
Casi siempre que haya edema en la extremidad inferior y no haya afectación arterial grave, tenga una úlcera asociada o no la tenga, la compresión va a ser una estrategia base para tratar a esa persona.